viernes, 6 de septiembre de 2013

Hayao Miyazaki dio a conocer las razones de su retiro del cine de animación, hoy viernes durante conferencia anunciada en Japón


Por Gabriel Zárate

Tras el anuncio en rueda de prensa, que el maestro japonés Hayao Miyazaki, con 72 años, se retiraba de la animación, durante la presentación de su último film “Kaze Tachinu” en la Mostra de Venecia se generó una gran expectativa  en todos los fans del gran cineasta japonés por conocer las autenticas razones de su retiro. Hoy viernes 6 de septiembre en Japón se dio a conocer en una conferencia de prensa, ante 600 periodistas de 14 países, que concedió el propio Hayao Miyazaki, donde explicaba los motivos  de su alejamiento de la producción de cine de animación.

“A las 7:00 de la mañana del día 6 de septiembre de 2013 (hora española) dio comienzo dicha reunión, pudiéndose seguir a través de NicoNico Video (el YouTube japonés), una conferencia que ha superado las 70.000.000 visitas online, procedentes de todas partes del mundo. Los primeros minutos del evento comenzaron con algo que nos ha roto el corazón a los que ya conocíamos que este no ha sido su primer anuncio de retirada:

“Soy consciente de que en el pasado he anunciado varias veces mi retirada, por lo que quizás muchos pudiérais pensar “Oh vamos, otra vez“. Pero en esta ocasión es la definitiva”.

Miyazaki comunicó su retirada a su equipo el día 5 de agosto de 2013 durante una reunión de personal, según comunica Toshio Suzuki, habitual productor de las películas del estudio de animación y cofundador del mismo. Los periodistas japoneses allí presentes señalaron que en el comunicado oficial sobre su retirada se mencionaba que solo “se retirará de la producción de películas de larga duración“, en lugar de una retirada total y definitiva del mundo del cine. El maestro Miyazaki comentó al respecto:

"Iré al estudio [Ghibli] todos los días. Y si hay algo que desee hacer, entonces lo haré. Quiero trabajar otros diez años más, pero no como director de largometrajes".

También habló sobre cómo su vista iba empeorando con el paso de los años, y la dificultad que esto le ha supuesto a la hora de dar forma a su trabajo.

"Si tuviera que pensar en mi próxima película, me llevaría seis o siete años en completarla. Siento que mis días en el mundo de los largometrajes de animación han acabado. Si dijera que me gustaría [hacer una nueva película], sonaría como un viejo soltando bobadas por la boca".
 
"Mi equipo y yo éramos jóvenes y solíamos pensar que producir estas películas era algo que se hacía una vez en la vida. Yo no tenía problema en perder horas de sueño. Pero no puedes pedir trabajar a ese ritmo siempre, porque la gente se hace mayor y tiene que elegir entre el trabajo o su familia".

Miyazaki subrayó también que los periodos de producción entre película y película se han ido alargando mucho con respecto a la era más fértil de Ghibli, entre mediados de los ochenta y los noventa, cuando el estudio produjo prácticamente un largometraje al año fruto "todas las ideas acumuladas" que tenían sus fundadores. 

"Han pasado cinco años entre mis dos últimas películas. La siguiente no la podría estrenar hasta dentro de seis o siete años, yo ya tendría prácticamente 80 y estaría agotado", explicó el director de Mononoke-hime (La princesa Mononoke), al asegurar que le ha ido costando cada vez más encontrar materiales para inspirar sus obras. 

El oscarizado cineasta tokiota se definió a sí mismo como el "artesano de una pequeña fábrica" más que como director, profesión que acabó adoptando "por petición de otros" y que, aseguró, nunca supo muy bien cómo ejercer. Explicó que el productor Toshio Suzuki y su equipo son los que "hacen todo" y que él, un hombre de costumbres, ni siquiera ve la televisión ni películas nuevas.

"Ante todo soy animador y para expresarme tengo que dibujar y eso significa que tengo que estar horas en la mesa de dibujo. Por mucho que me haya cuidado, con el tiempo se ha reducido el tiempo en que puedo estar ahí concentrado", afirmó.
 
"Voy a ser libre. Me gustaría hacer otras cosas, y no animación". Añadió además que le gustaría involucrarse más como voluntario en el Museo Ghibli, y bromeó: “Quizás se me exponga como monumento en el museo“.

“En un día de 12 – 14 horas solo puedo emplear sobre siete horas dibujandos, además de los debates, comidas y similares. Cosas que no son parte de mi trabajo. Mi trabajo está en la mesa de dibujo. Es una cuestión de horas, y a mi edad uno alcanza un límite donde ha de dejar el lápiz sobre la mesa e irse a casa”.

“No importa qué tan bien estés de salud, la capacidad de concentración se va degradando año tras año”.

“La gente puede preguntarse por qué no confío mi trabajo en otra persona, pero no es mi forma de trabajar. Siento que no puedo continuar”.

“Tras Ponyo en el acantilado empleé cinco años para realizar Kaze Tachinu. Realizar otra película me llevaría mucho más tiempo debido a mi edad. En cuatro meses tendré 73 años, significando que estaría cerca de los 80 cuando la película se estrenara. Sería estúpido si dijera que quisiera continuar”.

“Como animador, sientes alegría si eres capaz de plasmar cosas como el viento y la luz, pero un director espera al juicio de los demás. No es bueno para la salud”.

“Cuando tenía 30 y 40 años tenía muchos planes y ambiciones, por lo que depende de la determinación de cada uno de ellos”.


Fuente: http://www.deculture.es 
Agencia EFE

2 comentarios:

  1. Dió todo, pero siempre nos gustaría ´un poco más´ de Miyazaki!

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  2. Muy buen resumen de su rueda de prensa. Yo creo q Miyazaki cuando dice que se retira, y probablemente lo hace con mucho pesar, pero se merece un descanso. Le he dedicado un artículo exhaustivo a su obra, por si te interesa: http://laestaciondelfotogramaperdido.blogspot.com/2013/09/magia-ghibli-hayao-miyazaki-animacion-japonesa.html Un saludo!

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