Por Gabriel Zárate
Hotel de las Ideas (Argentina) sello editor
independiente creado por un colectivo de jóvenes historietistas argentinos,
donde participa Diego Rey su gran impulsador, anuncia como novedad de
junio la publicación de la novela gráfica “El animador”, obra con guion y
dibujos del talentoso historietista Juanungo (Juan Sáenz Valiente. 1981),
dibujante de “Sarna” y “El Hipnotizador”, autor integral de “La
sudestada” y de “Norton Gutiérrez”. L'animateur fue publicada en mayo del 2023
por Éditions Delcourt (Francia). “El animador” es un libro
de 256 páginas en blanco y negro y se basa en los últimos días del animador
argentino Rodolfo “Rufo” Sáenz Valiente, el padre de
Juan quien murió de cáncer el 2006. Valiosa novedad de junio.
“Neno se va a morir. La
enfermedad que lo tiene casi postrado y con intensos y cíclicos dolores ya no
se puede curar. Para cuidarlo, su familia contrata a un enfermero, un joven
amable y de pocas palabras. Neno es mal llevado y no soporta la
amabilidad ni la indulgencia del enfermero. Pero Neno es algo más: es
animador. Y el enfermero, aunque no entiende nada del oficio de Neno, se
ve arrastrado a compartir con su paciente este universo desconocido. Juan
Sáenz Valiente construye un drama condensado en personajes que reflejan
muchas de nuestras miserias y ternuras, y lo lleva hasta su culminación en un
juego formal que mezcla el lenguaje del cómic y el cine de animación”. (Nota
de Prensa).
“Claramente alude a los últimos días
de mi viejo, que empezando 2006 murió de cáncer. Yo me fui a vivir con
él para cuidarlo todo ese 2005 en que se le complicó la salud de una
manera irreversible. Eso fue lo que inspiró el libro. Pero es una historia que
quedó guardada y finalmente la escribí en pandemia. El encierro y no poder irme
a Francia me vino bien para ponerme al día, digitalizar todos los
archivos de mi viejo, sus pelis en 35mm y sus fotos. Así encontré un montón de
archivos que yo sabía que existían por relatos orales de mi padre y sus amigos,
pero que nunca había visto ... Todo eso hizo que escribiera el guion, que salió
como una patada, en una o dos semanas lo escribí entero. Se ve que llevaba diez
años pensándolo, pero nunca me había sentado a escribirlo, más que alguna
escena suelta. En ese momento tenía poca objetividad, pensé que era una
porquería escrita para hacer catarsis. Al mes lo leí y estaba bien, tenía algo”.
(Juan Sáenz Valiente)
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