Por Gabriel Zárate
Uno de los prestigiados autores centrales de la mítica revista “Lápiz Japonés” es el polifacético artista gráfico argentino Elenio Pico (1960), radicado en Barcelona, quien estuvo considerado como invitado para el “I Festival Internacional del Dibujo, la historieta y la Ilustración: Ciudad de Lima", organizado por La Municipalidad de Lima y Librería Contracultura de Benjamín Corzo, donde se homenajeará a los integrantes de “Lápiz Japonés” por los 20 años de la legendaria revista. Lamentablemente la presencia de Elenio Pico no será posible en Lima. Agradecemos infinitamente a Elenio Pico la enorme gentileza de haber respondido esta esclarecedora entrevista para “El lector de Historietas”, desde Barcelona. ¡Gracias maestro, usted es un grande y mejor persona aún!
Elenio, coméntenos sobre el origen de “Lápiz Japonés”. ¿Cómo surgió la idea de una publicación tan ambiciosa en su propuesta estética, durante el duro contexto de la desaparición de las grandes editoriales argentinas de revistas de historietas, a inicios de los noventas?
La iniciativa es de Diego Bianchi y Sergio Langer…parece que les sobraba un dinero y decidieron no tener automóvil y apostar por un proyecto colectivo de edición. Conectaron con una serie de creadores, fundamentalmente Ralveroni, Sergio Kern y para apoyarse en el diseño dos monstruos, Willi Peloche y Rapa. Ralveroni estaba en contacto conmigo en aquel momento y fue él quien me abrió las puertas. Era tal la energía del proyecto que empecé a asistir a todas las reuniones y por suerte quede adoptado por ellos. Hoy somos grandes amigos y de alguna manera prolongamos en nuestros proyectos aquel espíritu. Rapa está produciendo la revista de choque “Mongolia” en España en la misma dibuja Sergio Langer y otros ex Lápices como el Niño Rodriguez, Dario Adanti y Pablo Sápia. Bianchi está desarrollando su proyecto del “Pequeño Editor” en el cual participamos otros cuantos. Mi proyecto personal “Barquitos” tiene el color de la “Comuna del Lápiz Japonés”…en fin todos seguimos.
La inestabilidad económica y los constantes ires y venires de la política desarmaron lentamente buena parte del potencial editorial de la Argentina… posiblemente el cómic era uno de los frentes que más sufrió estas situaciones…la última revista con ritmo de aparición dedicada al cómic en Argentina en aquellos momentos posiblemente haya sido “Fierro”, su experiencia publicando el suplemento “Óxido” había llamado la atención de muchos creadores…había un hueco…alguien lo tenía que llenar, los dibujantes que trabajaban en medios estaban condicionados y estaban deseosos de un espacio de experimentación…alguien lo tenía que ofrecer… la gente que producía fanzines tenía ganas de ampliar su radio de influencia…en fin…estaba en el aire que algo así tenía que suceder…en poco tiempo surgieron dos revistas más con un carácter semejante: “Suélteme” y “El Tripero”…se generó un estrecho vínculo entre las tres.
¿Cuáles son sus principales recuerdos del grupo humano conformado entorno a “Lápiz Japonés”, que afrontó el proyecto y desarrolló sólidos lazos amicales vigentes 20 años después? ¿Cómo se conocieron Sergio Langer, Diego Bianchi y Elenio Pico?
A Sergio lo conocí en la Fundación de Artes Visuales, un proyecto de Hermenegildo Sabat… Sergio estaba haciendo una experiencia en un taller de acuarela que daba Carlos Nine, yo era ayudante de Carlos…eso fue un poco antes de la gestación del Lápiz, a Diego lo conocí ya gestado el proyecto, cuando (como ya conté) Ralveroni me empuja a llevar mis dibujos…fue un “amor a primera vista”…como tú dices todo el grupo mantiene hoy en día una relación de amistad y apoyo para los proyectos que hoy en día de manera individual desarrollan cada uno de los ex lápices japoneses.
“Lápiz Japonés” es una publicación que ocupa un lugar predominante en la historia de la historieta argentina ¿Cuales piensa que son sus principales cualidades y características artísticas que la convirtieron en una revista de culto en su país con solo cuatro números editados?
Creo que lo más importante fue la conjunción de autores y el campo de libertad que encontraron, la falta de condicionamientos que les permitió mostrarse de la mejor manera con mucha potencia. El grupo editorial tenía una noción muy clara de la importancia del mestizaje de lenguajes: Langer es quizás uno de los humoristas gráficos más salvajes que tiene la Argentina, Bianchi es un ilustrador tremendo, Ralveroni incorporaba criterios plásticos y filosóficos muy serios, Sergio Kern es una persona con una experiencia brutal en el campo de la poesía y la ilustración además de haber nacido en una imprenta…Rapa y Willi Peloche son mucho más que dos diseñadores gráficos, en lo personal yo venía del mundo de la pintura pero manteniendo con ella una relación en aquel momento muy difícil…era un pintor con carácter de ilustrador y un ilustrador con carácter de pintor…ellos me permitieron crecer en la profesión encontrar un lugar… hoy es más fácil encontrar ese tipo de figura pero en los noventa todo era muy diferente.
A todo esto sumamos lo planteado en la pregunta anterior, el vacío en el que se encontraba el cómic…que no era un vacío de autores, que en Argentina siempre han salido los dibujantes y narradores por debajo de las piedras…el problema era la falta de medios editoriales o la falta de credibilidad que tenían muchos autores en los medios que existían… así el Lápiz se convirtió en una suerte de plataforma, de vidriera… una experiencia enriquecedora y transformadora.
Muchos esperaban su arribo al Perú para el I Festival Internacional del Dibujo, la historieta y la Ilustración: Ciudad de Lima" y conocer personalmente al mítico trío central de “Lápiz Japonés” celebrando los 20 años de su aparición. ¿Qué ha motivado la imposibilidad de su viaje a tierras peruanas?
Bueno por suerte muchos ya nos han tratado en un viaje anterior en el año 2001, creo que fue…y allí estarán Diego y Sergio para charlar…También Allan Sieber y Fabio Zimbres fueron nombres que pasaron por el Lápiz Japonés…gente muy valiosa del panorama brasilero…Personalmente considero a Fabio Zimbres una de las mejores cosas que me pasaron en la vida…un interlocutor imprescindible…
Como te imaginarás las razones de la imposibilidad de mi viaje no las puedo conocer, se que Oscar Malca intentó hasta último momento que mi presencia se hiciera realidad…pero no pudo ser. Fíjate…y esto si me dolió profundamente, mi país facilitó condiciones para que viajaran los autores residentes en Argentina según tengo entendido…pero no consideró oportuno que yo viajara…en fin…trabajé muchos años coordinando un espacio de exhibición de artes gráficas en la ciudad de Buenos Aires…si hiciéramos el listado de nombres que puse a disposición del público argentino te sorprenderías…mucho tiempo trabajé en ese proyecto sin cobrar para sacarlo adelante…pero ahora uno se convierte en una especie de desclasado por el hecho de estar residiendo en Barcelona y no merecedor del apoyo de su país… en fin que yo no esté allí no es tan importante pero la ausencia del señor Breccia…esa sí que es una pérdida….
El público peruano podrá apreciar una exhibición de su obra centrada en su más reciente década creativa, sobre historieta e ilustración. ¿Que nos puede adelantar de esta exposición, preparada personalmente por usted? ¿Qué es lo que va a encontrar visualmente el público peruano cuando contemple la muestra de Elenio Pico?
Bueno…por allí se verán distintos aspectos de mi trabajo, historietas realizadas entre fines de siglo pasado y principios de este. “Pinoquio” son una serie de reflexiones sobre decadencia, consumo de drogas y filosofía barata… “barquitos” es un proyecto en el que están involucrados cien ilustradores de todo el mundo, entre ellos peruanos, hace tres años construí con maderas encontradas en la calle 119 barcos de madera y en sus velas incorporé las ilustraciones de todos estos colegas…los barquitos han tenido dos botaduras colectivas en Catalunya y de forma individual están viajando por Europa…me quedé con las ganas de ponerlos en fuentes y o ríos del Perú…ya tendremos oportunidad. Verán también “Pequeñas Historias de Grandes Pintores” que es un proyecto para niños en el que reviso la historia de la pintura desde mis limitaciones…También tendrán una serie de Historietas inéditas y una serie de ilustraciones que responden a un proyecto que estoy desarrollando en Barcelona junto a la asociación Punt d’intercanvi se trata de cinco libros que trabajan el tema de lo lingüístico, están editados en forma simultánea en cada libro los textos en árabe, urdú, wolof, quechua, chino, catalán, rumano y castellano, una experiencia integradora… Que es lo que puede encontrar el público peruano…sería muy pretencioso intentar adivinarlo…en todo caso espero que encuentren responsabilidad, curiosidad, deseo, experimentación, poesía…
¿Su producción infantil, siempre estuvo presente en su concepción del dibujo o la descubrió con el transcurrir de los años?
Siempre existió una sintonía buena e importante con los niños…siempre existió en mí el deseo de dibujar y contarles cosas a los niños… sería ingrato sino reconociera que fue el apoyo de Diego Bianchi el que me permitió acercarme profesionalmente a este universo en el plano profesional, el me abrió en momentos muy difíciles para mí en lo personal esa puerta que por suerte nunca se cerró.
¿Cómo es su vida profesional en Barcelona? Ciudad donde es un artista polifacético que abarca la animación, la ilustración, el arte plástico y la docencia. ¿Por qué Barcelona le garantiza las condiciones necesarias para desenvolverse en estos variados campos?
En este momento Barcelona está acusando el golpe de la crisis y las cosas se están poniendo un poco difíciles, sin embargo el trabajo de sembrar durante esta última década no fue vano…he realizado hace muy poquito un libro para el Museo Dalí de Figueras con la editorial de la Abadía de Montserrat. En el campo de la educación trabajo para el Instituto Europeo de Design desde la fundación de su sede de Barcelona dando clases de color y de Técnicas de representación y estoy trabajando en mi taller con alumnos en número variable desde hace unos años…
¿Qué proyectos artísticos nos puede anunciar en un futuro cercano en la obra gráfica de Elenio Pico?
En este momento estoy trabajando constantemente en el proyecto “Barquitos”, sigo con una serie de dibujos que forman parte de un mural de papel que mide unos diez por quince metros, interviniendo gráficamente sobre postales publicitarias y he realizado también una serie de mil pequeñas intervenciones sobre estampitas de comunión antiguas…en fin una serie de disparates gráficos que me dan mucha satisfacción… He terminado de dibujar una serie de acuarelas para un proyecto que aún no ha tomado forma definitiva ni conozco todavía su formato editorial final relacionado con una serie de bellísimos relatos de Julio Cortázar…en fin… hay algunos textos para niños que me están gritando a diario para que los saque del cajón…
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