sábado, 6 de febrero de 2010

Entrevista a Carlos Reyes: Panorama actual de la historieta chilena “Lo que está pasando hoy en mi país” (2ª parte)


Por Gabriel Zárate
Grabación y Fotografías de Carlos Tovar

En Argentina los jóvenes dibujantes al no contar con una industria editorial solida se forman pensando en acceder al mercado europeo. En el Perú los chicos no pasan del artesanal fanzine contracultural bajo la influencia de Crumb y la historieta alternativa ¿Que ocurre en Chile con sus nuevos historietistas? ¿Cuáles son las condiciones actuales para el crecimiento del comic chileno?

Carlos Reyes: Yo creo que la existencia de fanzines es fundamental. El fanzine provoca tanto en el lector como en el autor una suerte de periodo de aprendizaje, de incubación de ideas. El fanzine en nuestro país ha crecido mucho. Se publican cada vez más fanzines con autores increíbles. Es ahí donde nosotros empezamos a ver lo que se viene. El fanzine es futuro eterno para mí. Los nuestros no se comparan a los fanzines europeos. Cuando veo un fanzine francés para nosotros es un libro de lujo y para ellos es un simple fanzine. Nuestros fanzines son fotocopiados, son hechos con corchetes (grampas). El fanzine debe existir, ya sea influenciado por Crumb o por quien sea, me parece notable. Es ahí donde se foguea un nuevo autor y eso es lo que ha permitido mantener viva la historieta en Chile.

Nunca se dejaron de hacer fanzines contraculturales ni humor grafico y eso permitió que el germen de la historieta se mantuviera durante la dictadura de Pinochet y durante el advenimiento de la democracia en los noventas y hoy ha permitido que gente como yo pueda reunirse con otros amigos y crear editoriales independientes jóvenes, nuevas, de pequeños tirajes, con autores antiguos y nuevos. El futuro de la historieta está en los fanzines. Voy a ferias y vendo revistas de fanzines y el libro caro de cien páginas a color con lomo y me gusta también comprar el fanzine fotocopiado, porque es allí donde yo me entero de lo que está pasando, de lo nuevo que está surgiendo. Me encanta ir a la feria de fanzines como a la feria de libros oficiales. Soy un hombre de esos dos mundos. Ahora estoy editando libros con mis amigos de Feroces Editores y con mortis.cl. Eso no me impide seguir sintiéndome un fanzinero en el fondo. En Chile lo que ha permitido esta nueva explosión de historietas está en que muchos jóvenes producen al mismo tiempo que nosotros, abundante producción independiente en fanzines fotocopiados o serigrafiados de notable calidad.

Tú afirmaste en una entrevista: “Ni siquiera el cine de autor independiente tiene tanta libertad como la historieta de autor puede llegar a ofrecer”, eso es válido para los autores independientes, pero en la práctica los autores de historietas que asumen su labor como una profesión lucrativa, responden a las exigencias de las editoriales que les terminan imponiendo los temas y los formatos a trabajar. ¿Te reafirmas en lo dicho? ¿Crees que el historietista goza realmente de plena libertad?

Carlos Reyes: Yo espero que sí. Espero replicar experiencias que me gustaron mucho como L'Association. Siento que ellos son una gran editorial, aunque para los europeos siga siendo pequeña. Ha permitido que sus autores tengan libertad, que estén un poco en el mainstream y que lleguemos a conocerlos en Latinoamérica por las ediciones que hacen, pero siguen siendo independientes. Sí, desde el momento en que no existe una gran industria editorial en ninguno de nuestros países, no existen unas directrices tan potentes. Recuerdo el caso de Gonzalo Martínez que hizo Road Story la primera novela grafica chilena que tuvo ese nombre, adaptada de una novela de Fuguet. A Gonzalo yo le preguntaba lo mismo que tú, pero en su caso por Alfaguara, una multinacional, “seguramente te controlaron” y siempre él me dijo: “No, me dijeron que adaptara como quisiera, no se metieron en nada, no censuraron nada”. Lo dejaron ser y el libro ha funcionado y al alero de una industria editorial muy importante, no de una independiente o pequeña. Si él pudo hacer eso allí, imagínate que pasa con los independientes.

La única restricción que debe tener cualquier autor sea independiente o profesional es que su historieta sea legible para todo el público, aunque sea loquísima, que la narrativa sea limpia, que sea transparente aún cuando yo no entienda la historia, porque tiene contenidos que se me escapan, pero la transparencia narrativa es lo que manda. Si la historieta no se entiende nada de nada, ni a nivel visual ni de contenido, esa es la única restricción que aplicaría al autor. Esa sería la única restricción, por eso insisto: Ni siquiera el autor de cine independiente tiene tanta libertad como el autor independiente de historieta. Pues el autor de cine independiente contemporáneo tiene un productor, actores, un camarógrafo que interpretan su obra. El autor de historieta es su único intérprete, si tiene un guionista ya hay dos. Para hacer una película se necesita miles de dólares y un equipo mínimo de veinte personas. Un equipo editorial es pequeño, de allí que haya más libertad también.

La carencia de una industria editorial nacional que se interese por de la historieta en nuestros países es terrible. Tú apuesta personal es por fomentar la autoedición, pero eso impide la profesionalización del oficio. En tu opinión: ¿porque la industria editorial latinoamericana no le da importancia a la historieta?

Carlos Reyes: No lo sé, no sé porque no le da importancia, pero lo que sí sé es que está empezando a darle. En mi país Alfaguara y Ediciones B que son multinacionales reconocidas, están editando humor grafico e historieta, lo que para nosotros es asombroso, nunca había pasado, nunca había sucedido. Soy optimista, defiendo la autoedición, porque en Chile la autoedición no fue algo que pudimos elegir, era algo que había que hacer. Durante mucho tiempo nadie editaba nada. Si nadie puede hacerlo por ti, mi lema es “Al que se le ocurre lo hace. Hazlo tú por ti mismo”. Una suerte de punk editorial. “Nadie lo hace, lo voy a hacer yo”. Si nadie edita los libros que quiero ver en mi biblioteca lo voy a hacer yo.

Esa es la autoedición, pero estoy viendo que en mi país la industria editorial chilena está mirando a la historieta con buenos ojos. Esta editando poco, lentamente, no tiene un éxito editorial gigantesco, pero por primera vez después de cuarenta años lo está haciendo. Me parece notable y nosotros los independientes estamos creciendo, estamos haciendo una edición cada vez más profesional. Estamos haciendo ediciones baratas, accesibles, con distribución en todo el país. Todavía no vendemos lo que esperamos para hacer de esto una empresa solida, pero estamos creciendo y yo tengo paciencia. No es algo rápido, puede demorar bastantes años más.

Tú fascinación por El Dr. Mortis. ¿Cómo nace? ¿Y sobretodo cómo logra pervivir hasta ahora? a pesar de los años transcurridos. ¿Cuál es tu responsabilidad en la reedición de este clásico chileno? ¿Háblanos de quien fue Juan Marino, de su vital importancia desconocida por muchos?

Carlos Reyes: El Dr. Mortis es la historieta que más me gustaba cuando yo era pequeño, una historieta de terror dibujada por grandes autores locales, chilenos, y Juan Marino fue mi maestro. La relación con el Dr. Mortis y Juan Marino es de maestro-discípulo. Yo me siento un depositario del trabajo de Juan Marino, un hombre a quien yo admiraba mucho. Imagínate que tienes a alguien a quien admiras y de pronto un día conoces a ese ser admirado y se vuelve tu amigo, si es un héroe de tu infancia, es el sueño de cualquiera. Eso es el Dr. Mortis para mí, esa es la importancia que tiene. Mi responsabilidad en la reedición de Dr. Mortis, lo que Juan Marino llamaba la revivificación del Dr. Mortis, tiene que ver con dos personas más, con Miguel Ángel Ferrada y con X-Flint, mis amigos con quienes formamos mortis.cl y con los que reeditamos las historietas del Dr. Mortis antiguas. Estamos haciendo libros con lo mejor del Dr. Mortis de los 180 episodios y al mismo tiempo estamos haciendo nuevas historietas del Dr. Mortis. Es una deuda que teníamos, porque quizá es, junto con Condorito y Barrabases, uno de los personajes más conocidos en mi país.

Tanto así que un adulto que escuchó el radioteatro desde 1945 hasta el 77-78 también pudo leer las historietas entre el 67 y el 77. Pero la gente joven que nunca leyó ni escuchó el radioteatro lo escuchó al menos de oídas porque es un personaje tan importante que está en el vocabulario popular. En mortis.cl se pueden ver las revistas que estamos haciendo, también hay resúmenes de las historietas con portadas, artículos, ensayos, historietas nuevas y además los radioteatros que se pueden bajar gratis desde Internet. Todo eso está ahí y tenemos nuevos proyectos: seguir editando al Dr. Mortis antiguo, editar el 2010 “El retorno del Dr. Mortis”, una novela grafica nueva escrita por Miguel Ángel Ferrada y dibujada por Ítalo Ahumada que va a marcar el 2010, va a ser una historieta muy importante y también editar los nuevos episodios del Dr. Mortis en historias autoconclusivas. Para mí es mi héroe de infancia y ahora soy yo el que lo edita, es un sueño maravilloso.

Juan Marino es un nombre clave en la historieta chilena

Carlos Reyes: Juan Marino es un gran guionista que jamás se propuso hacer una obra artística. Sin pretensiones de "artisticidad" logró una obra maestra, sólo con su trabajo y con los trabajos de sus dibujantes que fueron muchos: Máximo Carvajal, Juan Francisco Jara, Ernesto López, Roberto Tapia por nombrar los más importantes.

2 comentarios:

  1. Un abrazo a Gabriel por su gentileza y acuciosidad en esta entrevista (Hablé demasiado y me temo que hoy padeces esta tediosa transcripción, lo siento amigo)

    Aprovecho aquí también para agradecer a los viejos (y nuevos) amigos que pude volver a ver (y conocer) en mi reciente viaje a la bella Lima.

    Gracias a todos por la hospitalidad y el cariño y por su puesto mis respetos al mega anfitrión: José antonio "Chiqui" Vilca y a su madre, Gladys, por los cuidados que nos dispensaron, tan pródigos como inmerecidos.

    Saludos a todos

    Carlos Reyes G.

    ResponderEliminar
  2. gabriel: interesante reportaje,y es un mensaje de prueba, ADELANTE

    ResponderEliminar