Por Gabriel Zárate
Hace un año Carlos Trillo murió de una forma totalmente inesperada, cosa que fue vivida como un cataclismo cósmico para el mundo de la historieta. El año 2008 Trillo vino a Lima, a La Feria Internacional del Libro donde dictó un Taller de Guión de Historieta en dos sesiones y utilizó para ello, en la primera sesión, el Plot de “El monstruo indeciso”, un proyecto de historieta para Francia, totalmente en francés. Lo empleó como forma didáctica, de enseñar a los asistentes la manera adecuada de presentar un Plot a un editor. Además venía acompañado de las 5 primeras páginas de la historieta ya dibujadas por Peni, con quien hace poco habían realizado “Neferu el gato”, libro que nos mostró en su versión francesa.
En el día de la segunda sesión del Taller, antes de empezar, me hizo un cordial gesto para que me acerque y me obsequio el Plot y las 5 páginas de “El monstruo indeciso”. Recuerdo que me quede frío en ese instante. Sé que nunca se concretó “El monstruo indeciso” en historieta y conservo aquel regalo como un pequeño tesoro, único e invalorable, aunque sea una copia, que me recuerda lo peculiar del destino: Nunca me imagine conocer a Carlos Trillo y menos aún que aquella sería la primera y única ocasión de tratarlo personalmente. Un fuerte abrazo maestro, un año después.
Hace un año Carlos Trillo murió de una forma totalmente inesperada, cosa que fue vivida como un cataclismo cósmico para el mundo de la historieta. El año 2008 Trillo vino a Lima, a La Feria Internacional del Libro donde dictó un Taller de Guión de Historieta en dos sesiones y utilizó para ello, en la primera sesión, el Plot de “El monstruo indeciso”, un proyecto de historieta para Francia, totalmente en francés. Lo empleó como forma didáctica, de enseñar a los asistentes la manera adecuada de presentar un Plot a un editor. Además venía acompañado de las 5 primeras páginas de la historieta ya dibujadas por Peni, con quien hace poco habían realizado “Neferu el gato”, libro que nos mostró en su versión francesa.
En el día de la segunda sesión del Taller, antes de empezar, me hizo un cordial gesto para que me acerque y me obsequio el Plot y las 5 páginas de “El monstruo indeciso”. Recuerdo que me quede frío en ese instante. Sé que nunca se concretó “El monstruo indeciso” en historieta y conservo aquel regalo como un pequeño tesoro, único e invalorable, aunque sea una copia, que me recuerda lo peculiar del destino: Nunca me imagine conocer a Carlos Trillo y menos aún que aquella sería la primera y única ocasión de tratarlo personalmente. Un fuerte abrazo maestro, un año después.
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